Oaxaca es un estado en el sureste mexicano, con una población de 3,967,889 de la cual el 52.2% son mujeres

De acuerdo con el Informe de pobreza y evaluación 2020 (Oaxaca) realizado por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), en 2018, el 91.5% de la población en Oaxaca estaba en situación de pobreza o de vulnerabilidad por carencias o ingresos.

De acuerdo con el Inegi (2015) el promedio de escolaridad en el país es de 9.2 grados, mientras que en Oaxaca es de 7.5.¹; en 2018, la accesibilidad a los servicios de salud en el estado fue del 83.7%; la accesibilidad de los hogares a la banda ancha era del 29.0%² y solo una de cada 10 escuelas en Oaxaca contaba con acceso a internet.³ Además, la tasa de informalidad laboral en el estado es del 81.43%, la más alta del país en 2019. ⁴ y la mayoría de ese sector son mujeres.

Desde el registro de casos de violencia que hacemos en Consorcio Oaxaca solo hemos visto crecer en los últimos años los índices de violencia contra las mujeres, de 2015 a 2020, según cifras oficiales el número de víctimas de feminicidio en México aumentó 130%.⁵ En nuestro país 11 mujeres pierden la vida cada día. En Oaxaca, del 1 de diciembre de 2016 –fecha en la que asumió el cargo el gobernador Alejandro Murat- al 31 de diciembre de 2020 se cometieron 490 feminicidios.

Si hemos aprendido algo durante la pandemia es que ésta no ha hecho más que profundizar las desigualdades sociales que le precedían. El impacto del Covid 19 en Oaxaca es considerable pues las condiciones previas ya eran de por sí complejas, como lo muestran los datos anteriores.

Desde Consorcio Oaxaca creemos que aun nos hace falta analizar y conocer con mayor profundidad los impactos que en nuestro estado está dejando la pandemia y, particularmente, cómo la están viviendo las mujeres, sobre quienes se recargó, de entrada, la labor de cuidados que implicó el confinamiento en los hogares, esto no solo implicó la atención a personas enfermas o infancias a las que había que acompañar en sus procesos educativos, sino también representó hacer ésas y otras labores a la par del trabajo productivo, a través del “home oficce”.

Las feministas no empezamos a hablar de la importancia de los cuidados y de su necesaria redistribución a partir de la pandemia y, lo que veníamos discutiendo, nos ayudó a entender cómo afecta la vida cotidiana de todas nosotras este tiempo.

El confinamiento también nos invitó a pensar cómo podríamos hacerle frente al Covid 19 sin que las conquistas ganadas por los movimientos feministas, tan pujantes en los últimos años, se vinieran abajo.

Son muchas las preguntas que tenemos pero sin duda, contar con un espacio al que recurrir en búsqueda de información es necesario para irnos aproximando poco a poco a las respuestas o a mejores preguntas que nos detonen nuevas formas de relacionarnos, entendernos y apoyarnos entre nosotras.

Para ello, hemos creado este micrositio, en el que encontrarás estadísticas, libros, audios, fotografías y otros materiales informativos que, consideramos, pueden ayudarnos a entender este tiempo complejo que nos ha tocado vivir.

Este espacio, se encuentra dividido en: